Durante el mantenimiento de la caldera, un ingeniero de calefacción necesita herramientas de calidad especializadas. Empeza con el termómetro diferencial con una o más sondas de contacto. Para medir una temperatura, también es posible utilizar un termómetro de infrarrojos capaz de detectar si la temperatura está aumentando o disminuyendo, gracias a una señal cromática visual (cambio de color en el termómetro de infrarrojos).
Para la parte eléctrica, utilice un multímetro o un probador eléctrico digital. Un multímetro puede estar compuesto de una abrazadera amperométrica capaz de medir un coeficiente de eficiencia.
Para la solución de problemas de la caldera de gasóleo, es necesario conocer la cantidad de hollín en el aparato de calefacción. Para ello, necesitará una bomba opacímetro, también llamada prueba de humo, y papeles de filtro con una escala de comparación universal.
Para medir las moléculas nocivas, es importante instalar un detector de monóxido de carbono y una alarma contra incendios o incluso un sistema de detección de gases compuesto por una sonda compatible. Un sistema de detección de gas puede ser contado de uno a tres canales para instalar varias sondas: sonda remota de gas natural, sonda de detección de GLP,....
a instalación, ya sea combustible, agua o aire. Un manómetro tiene un rango de uso con respecto a la presión. Por ejemplo, un manómetro de gasóleo, como una caja de glicerina de acero inoxidable, debería oscilar generalmente entre 4 y 40 bares, mientras que un manómetro de gasóleo está entre -1 y 0 bares.
Para instalar ciertos dispositivos de seguridad o un grifo, será útil utilizar una abrazadera de llave sanitaria o una abrazadera de cobra. Para el cableado se necesitan unas tenazas de desaislado multifunción eléctricas o unas tenazas de desaislado automáticas.